Una de las anécdotas bochornosas del debate del 4-M ha sido la llegada en taxi del candidato de Podemos, Pablo Iglesias, al que le han recriminado su ‘cambio de vida’ desde su residencia en el barrio de Vallecas cuando empezó en política hasta el chalé de Galapagar donde vive actualmente.
El taxista que acompañó hasta la puerta del debate a Iglesias es Cecilio Rodríguez, taxista de profesión y que en las listas del partido morado.
Pero al término del debate las cámaras han captado la imagen de Pablo Iglesias montándose en el coche con su chófer privado para volver a su casa de Galapagar.
Pero hay más. En ‘El Quilombo’ demostramos que no vino en taxi sino que se subió al mismo en el párking de Telemadrid.